Divorcio 'suave' del dogmatismo obradorista en primeros nombramientos del gabinete de Sheinbaum
Manage episode 424818531 series 3214379
Gustaron los primeros nombramientos del gabinete de Claudia Sheinbaum.
Tranquilizó los mercados.
El peso recuperó espacio.
Parece que todo va bien.
Pero lo más interesante son los mensajes políticos que mandó este primer paquete de nombramientos, pues ayudaron a creer que Claudia Sheinbaum, probablemente, sea la que encabece su gobierno.
Comencemos con Alicia Bárcena, que se decía que era cabeza de playa de López Obrador. Su nombramiento como Secretaria de Medio Ambiente es una carambola de tres bandas, pues no sólo complace las demandas del presidente saliente, sino que además la recoloca en lo que sí sabe hacer. Es licenciada en Biología y tiene maestría en Ecología. Su experiencia en la CEPAL ciertamente le daba aval como Canciller, y la mantienen en la pelera para suceder a Guterres en la ONU en 2027, pero la verdad es que no sólo encaja mejor en Medio Ambiente, sino que perfila cercanía con los deseos de AMLO.
Juan Ramón de la Fuente también es uno de los enclaves políticos del obradorato en el gabinete de Sheinbaum. El ex rector de la UNAM, por recomendación -imposición pues- de AMLO empezó a armar la estrategia de la entrega-recepción. El nombramiento del también exembajador de México en la ONU tranquiliza por igual a los mercados.
Marcelo Ebrard es un caso de cortesía política, y a pesar de que tiene más experiencia como canciller que en temas de economía, evidentemente su nombramiento no solamente es un tema político, sino un mensajito de buena voluntad para Estados Unidos con el afán de resolver los conflictos comerciales alrrededor del T-MEC.
Rosaura Ruiz no sólo es amiga cercana de Claudia Sheinbaum, sino que además encabezará la cartera que políticamente marca la separación de los dogmas obradoristas. La presidenta electa mandó muchos mensajes de que quería colocar a Ruiz frente a la SEP, pero esta secretaría está colonizada por lo más abyecto y dogmático del obradorismo, por lo que optó por mejor crear una nueva Secretaría de Ciencias, Tecnología e Innovación, asestando con ello una muy elegante bofetada política a López Obrador, quien siempre despreció las ciencias y la tecnología. Al final del día Sheinbaum es científica, y con el nombramiento de Rosaura Ruiz confirma esa vocación.
Julio Berdegué Sacristán en Agricultura es algo raro y congruente de forma simultánea. Ciertamente es una eminencia en temas de agricultura, pero también es un férreo opositor al tema del maíz transgénico, lo cual obviamente va a meter en problemas a Marcelo Ebrard, porque ese es precisamente uno de los grandes problemas que están metiendo tensión en el T-MEC.
El prieto en el arroz es inevitablemente Ernestina Godoy, que se va a la Consejería Jurídica. Godoy es muy cercana a Claudia Sheinbaum, basta recordar que es la ex fiscal de la Ciudad de México. Pero lo más relevante es que su nombramiento destierra uno de los rumores más frecuentes sobre el exministro Arturo Saldívar, a quien muchos veían en esta cartera. Hay quienes dicen que ya nos libramos de Zaldívar, y hay quienes auguran que este pernicioso personaje podría ser el próximo Secretario de Gobernación
De entrada, el hecho de que Claudia Sheinbaum nombre a expertos en la materia para cada una de las carteras rompe con la tradición implantada por López Obrador de colocar floreros en las secretarías. Ese absurdo 90% de lealtad y 10% de capacidad del obradorato parece haber terminado, pero quizá estemos cantando victoria demasiado pronto, pues faltan platos fuertes como la SEP y la Secretaría de Gobernación.
Sheinbaum se separa poquito de López Obrador acercándose al obradorato. Es interesante por su propia ambivalencia.
Pero será hasta el próximo jueves, en el próximo paquete de nombramientos, cuando ya nos empecemos a ver de verdad hacia dónde va el sexenio de Claudia Sheinbaum.
645 פרקים